lunes, 27 de diciembre de 2010

EL SER HUMANO COMO PERSONA

A veces, en los avatares que nos da la vida puede resultar descorazonador, que alguien que trata de hacer un bien a su país, sea impedido por personas o grupos de lobys que lo único que tratan es de negar dicha posibilidad.

En cierta forma, las personas somos en lo general inquietantes con nosotros mismos y con quienes nos rodean, ya que no es fácil de imaginar que la mayor parte de la población de los países que hay en el mundo, o bien piensan por estereotipos de su cultura que la bondad del ser humano es infinita o creen que cuando alguien habla de bondad -como término puro- piensan que lo hace con intereses ocultos.

En gran parte, esto esta en la dinámica del ser humano cuyo propósito -no siempre- es conseguir algo que le proporcione confort o felicidad momentánea frente a otros de su misma especie. Es por ello, que sin una formación adecuada por parte de las personas, se puede llegar a crear un clima de tensión en algunas partes del mundo que podría tener consecuencias catastróficas para la humanidad.

El peligro, no reside en el ser humano en si, sino que esta en la naturaleza que Dios y La Evolución a proporcionado al conjunto de personas que pueblan este planeta llamado Tierra. La persona como unidad, se hace inocente así misma ya que tiene la peculariedad de que si esta quiere, se puede formar como un propio ente con los conocimientos adquiridos que nos nutre la naturaleza.

Es por ello, que las grandes sinrazones que a veces se forman en este planeta, se realizan cuando las personas dejan de ser un ente propio y se juntan entre sí para adquirir el grado de fuerza que podrá llegar a nublar el espíritu de la razón y crear un clima perverso de odio y terror en caso de conflicto de intereses.

Por ello, lo que quiero expresar con este artículo aunque sea una utopía por mi parte, es que ya que el mundo nos ha proporcionado la infinita sabía del razonamiento y de la dialéctica sea cual sea la postura ideológica de cada cual, no vayamos a desaprovechar dicho fruto, ya que la posibilidad de ser egolatra ante las diferentes razas o culturas nos puede conducir al camino del mal y al de la destrucción como especie dominante de este planeta.

viernes, 10 de diciembre de 2010

LA SABIDURIA DE LA IGNORANCIA.

Este principio consta de que por el hecho de creerse una persona que da libremente una opinión sobre un acontecimiento reciente, indiferentemente de no saber nada acerca de él; no quita el hecho de que dicha persona de su punto de vista sobre el particular. Las consecuencias son inmediatas, ya que al no saber de lo que se habla, se tendera a la reiterada utilización de argumentos no validos en el sentido de que puedan atentar contra cualquier principio de convivencia o contra principios civiles fundamentales de los individuos; entiéndase, a aquellas personas que formen una característica o varias en común: credo político, raza, sexo, discapacidad, religión, etc.

Así, con esto, a nuestros periodistas, ya no les interesa la comunicación fehaciente y veraz, sino que buscaran en todo momento en procurar dar ellos la noticia acontecida en primer lugar, sin comprobar -yendo en contra de los principios éticos y morales de cualquier periodista que ha estudiado la carrera- que los datos de la dicha sean correctos o incorrectos.

Esto se debe, a que el periodismo del pasado ha dejado de tener vigencia, ahora lo que se lleva es que indiferentemente del credo ideológico del medio de comunicación en el que trabaje dicho periodista, este, se a de amoldar a su línea ideológica editorial si no quiere perder su puesto de trabajo frente a su forma de pensar propia. El periodista se ve obligado a estas exigencias para con aquellas personas a las que le debe el fin pecuniario. Ya el objetivo primordial del periodista, en este caso, será informar de dicha manera, con el objeto de atraer o mantener a personas de los postulados del medio de comunicación en cuestión.

En consecuencia este manera de actuar por parte de los medios de comunicación conllevara al ciudadano medio graves prejuicios ideológicos y la consiguiente fragmentación de la sociedad, ya que esta manera de actuar de los periodistas, lo único que harán sera publicar aquellas opiniones de las personas que sean de su credo ideológico, indiferentemente si dicha declaración sea un disparate o no.

Lo importante para la persona media sera haber aparecido en el medio de comunicación en cuestión. Así esta podrá decir a sus amistades que ha aparecido en tal medio para poder tener su momento de gloria. Este comportamiento que parece más bien de un niño precoz en vez de adulto se da muy a menudo a pesar de los pesares. Además, muy posiblemente, los periodistas fomenten dicho comportamiento con objeto de dar más interés -gancho- a la noticia en si, y buscar un titular donde antes no lo había.

Por tanto, esta forma de actuar del llamado “cuarto poder” creara los resortes necesarios para que las personas nos volvamos apáticos o incongruentes con la opinión dada ante determinados hechos acontecidos, ya que al ver una gran variedad de opiniones sobre un mismo tema –especialmente cuando el poder lo utiliza para su perpetuación en el organigrama del Estado-, no se llegara a establecer por parte de la sociedad cual sera la solución correcta. Ademas faltara el nexo común de establecer la manera de encauzarlo diplomaticamente para así llegar a un consenso entre todos.

Por ello, sera importante establecer si esta dejadez o ignorancia por parte de la sociedad al dar siempre un punto de vista sobre algo, aunque se tengan conocimientos o no, sobre el hecho en si, sera perjudicial para nuestros intereses constitucionales.

De darse este caso, se supondrá que lo único que se lograra traer con estas formas de opinar, sera poco a poco la perdida de nuestras libertades y nuestros derechos civiles en beneficio del poder constituido, debido a que a la larga, dejaremos de interesarnos por dichas noticias o bien pensaremos inconscientemente que la forma de actuar de nuestros dirigentes políticos sera para nuestro bienestar de libertad y confort que hemos obtenido a lo largo del tiempo gracias a nuestros padres y abuelos, cuando en realidad, y gracias a nuestra ignorancia a la hora de dar todo tipo de opiniones por buenas, lo único que conseguiremos es ir destruyendo todo ese cumulo de libertades que hemos hereda ro.

Al fin y al cabo, a la larga, estaremos perdiendo nuestra propia batalla de libertades civiles sin que esta sociedad hipócrita y asentada en la comodidad de la prosperidad económica -heredaros gracias a la lucha de clases de nuestros familiares- hagamos nada por impedirlo.

DEDICADO A LOS MAESTROS DEL ARTE DEL COMIC: STAN LEE, STEVE DITKO Y JACK KIRBY POR SERVIRME DE INSPIRARIÓN Y DE GUÍA EN ESTE MUNDO TAN COMPLEJO.

jueves, 2 de diciembre de 2010

MI ESTANCIA EN EL HOSPITAL PSIQUIATRICO DE ZAMUDIO EN EL 2003

Para mi, el año 2003 no sera recordado solamente por la Guerra de Iraq, sino mas bien la recordare por la grave crisis psicótica que tuve durante ese año. Hay que recordar que yo tenía 20 años y que vivía -sigo viviendo, y lo seguiré haciendo- en el País Vasco en el que debido a el enrarecimiento de la política entre nacionalistas y constitucionalistas hacía que dicho ambiente no fuese muy placentero para aquellos que lo único que querían era formarse academícamente y vivir en paz respetando las ideas -aunque estas fuesen despreciables- del conjunto de la sociedad vasca.

Mi primera noche que pase en Zamudio, uno de los compañeros de habitación se masturbo y se corrió en la mesilla de noche a un palmo de mi cara cuando yo estaba plácidamente dormido. Probablemente uno de mis compañeros -eramos tres en la habitación- dio la voz de alarma, y el equipo de enfermería lo redujo y le trasladaron a otra instancia.

Ya se que yo estaba dormido, pero lo supe desde el primer momento, debido a que la persona que tenia que limpiarlo hizo dejadez de sus funciones y en la mesilla de noche cualquiera podría apreciar que quedaron restos en el papel de váter..
Por otra parte, yo estaba tomando seroquel 100, mmg por orden de mi psiquiatra. La dosis me proporciono gran estabilidad emocional y de hecho gracias a la cual estaba comenzando a salir del agujero psíquico en el que me había metido yo mismo.

Después de más de una semana comencé a notarme bien, pero al despertar me sentía nublado e impregnado en una sustancia que me recordaba claramente a tabaco de canabis. Por ello, una noche decidí no dormirme para ver si estaba en lo cierto, y efectivamente, descubrí que el “nuevo” compañero de habitación se pasaba la noche fumando porros cuando el resto de sus compañeros dormían tranquilamente en las camas.

Naturalmente, hacer dicha acción era muy peligrosa y prohibitiva en un hospital, ya que en caso de incendio podría poner en peligro tanto la estructura del edificio como la vida del resto de los pacientes.

Por ello decidí denunciarlo tranquilamente a mí psiquiatra para que se tomasen las medidas oportunas, pero cuando le dije a la psiquiatra que era la persona que velaba por mi bienestar psíquico, que el "nuevo" compañero de habitación por las noches fumaba porros en la cama mientras el resto de sus compañeros dormíamos, ella, pensando que iba a denunciarlo a la policía me subió la dosis a 300 mmg con objeto de crearme un brote psicótico galopante con objeto de que el resto del personal o pacientes el juez pensase que yo estaba loco.

Yo bajo ningún concepto pretendía denunciar a Osakidetza, lo único que quería eran que se tomasen las medidas oportunas contra dicha causa, ya que el otro paciente podía poner en peligro tanto a los que dormíamos con el como al resto del hospital en caso de producirse un incendio. Además estaba tajante mente prohibido fumar en las camas y era responsabilidad del hospital que tales hechos no se produjesen.

A partir de ahí, mi estancia fue un auténtico infierno ya que lo único que debido al brote psicótico brutal que tuve -propósito que consiguió mi psiquiatra-, lo único que quería en ese momento era suicidarme porque veía etarras por todas partes, ya que a partir de ese momento perdí la noción de la realidad.

Además, la mayor parte del resto de pacientes que estaban por el centro sanitario tuvieron -no todos- un comportamiento conmigo un tanto humillante porque no paraban de tirarme el humo a la cara cuando jugaba a cartas o hablar de lo bueno que era ETA cuando asesinaba a algún constitucionalista con el único propósito de humillarme públicamente o algo peor.

Eso si, en la mayor parte de las veces, no caí en la trampa, pero les puedo asegurar que las secuelas psíquicas que se me quedaron fueron importantisimas, ya que tarde más de dos años y medio en recuperarme, teniendo que tomar una medicación -Zipresa 10 miligramos- que me dejaba literalmente como un autentico zombi de cara a los estudios o sin poder hacer nada de vida social con mis amigos o parientes.

A pesar de eso creo que logre ante ponerme a la adversidad y conseguir formarme academicamente; pero eso si, en el doble de tiempo estipulado -cuatro años en vez de dos- obteniendo un Ciclo Superior de Documentalista Sanitario y seguir en la brecha y aprovechar los dones que a cada uno nos ha dado la naturaleza para poder vivir lo más tranquilamente posible y lograr anteponernos ante la adversidad.