Hace
pocas semanas (06/01/2013), el Sr. Reverte escribió un artículo
sobre la educación que estaban recibiendo nuestros jóvenes en la
escuela. En el, daba su opinión sobre una serie de asuntos de
actualidad que no deberían de pasar desapercibida para la población.
Sobre todo, para aquellos padres en donde sus hijos están recibiendo
educación.
Estos
son algunos de los extractos del artículo que escribió dicho autor,
y que me planteo responderle dando mi punto de vista particular al
respecto.. Aun así, probablemente él, ya sepa la respuesta; ya que
entiendo que su articulo era simplemente de alerta hacia la población
de como están cambiando las cosas en nuestra sociedad. Ya que es bajo
mi punto de vista, en el que el poder político o mejor dicho
“nuestra oligarquía política con barniz democrático”,
la que le interesa cada vez más, que seamos más individualistas e
ignorantes de nuestro pasado cultural, para que así, a ellos les sea
mas fácil manipularnos.
“Pero
cuando se refieren a lengua, conocimiento del medio y cosas así, el
desorden y la aparente improvisación saltan a la cara en cada
página. Las ideas básicas se pierden en detalles accesorios,
lugares comunes, vaguedades facilonas”.
El
primer lugar, he de decir, que sin el dominio de la lengua, el ser
humano no puede desarrollarse. Los antiguos filósofos griegos
-Aristoteles, Platón, Seneca, etc- antes de la era cristiana y los
humanistas a mediados del siglo XV, ya dejaron constancia, que sin el
dominio de la lengua para el uso de la retórica, la sintexis; el ser
humano puede verse sometido a todo tipo de manipulaciones
partidistas.
La
teoría de Platón con el Mito de la Caverna de base, es todo un
ejemplo, ya que él, se dio cuenta que solo una exigua minoría
privilegiada que era la que ostentaba el poder político, social y
económico, frente a la inmensa mayoría de la población que no
poseía prácticamente nada. Por ello, Platón, decía que para salir
de las tinieblas -ignorancia- y ver la luz -sabiduría-, el hombre
debía primeramente darse cuenta en la situación en la que se
encontraba y a partir de hay, ir teniendo consciencia y querer
descubrir la naturaleza y el sentido de las cosas en todos sus
aspectos e ir poco a poco saliendo hacía la luz -sabiduría-. Porque si
esperamos como hace miles de años que el poder político vaya a ser el
que quiera el bien para nosotros; he de decir que estamos
completamente equivocados, ya que lo único que pretendera como he
dicho, es perpetuarse en el poder.
“La
Historia se plantea sin cronología, con absurdos y confusos saltos
adelante y hacia atrás que nada establecen. Tampoco hay lecturas, o
muy pocas. Ni criterio. Sólo ideas simples sin contexto intelectual,
ni contrastes. Los textos se limitan a cumplir, supongo, con
programas generales; pero no ahondan en nada. Todo es falto de rigor,
sin plan último. Sin establecer qué conocimientos debe tener un
niño para entender el mundo en el que vive. Sin estrategia para
determinar qué interesa que los niños sepan, y cómo lograr que lo
sepan: sólo tácticas oportunistas que buscan hacerlo todo fácil y
asumible. Hojeando esas páginas comprendo perfectamente por qué hay
niños de trece años que conocen los ríos de Valencia o de
Extremadura y no los de España. Por qué ignoran qué es una
preposición o un adverbio, para qué sirven y cómo deben usarse.
Por qué hemos quitado a los chicos la posibilidad de comprender, y
de pensar usando lo que han comprendido”.
“Divide
y vencerás”, o mejor dicho, confunde y vencerás. Que quiero decir
con esto. Muy simple: No se trata de convertir a los niños en
ignorantes supinos, es mucho más aterrador. Al fin y al cabo un
ignorante, tiene la oportunidad por si mismo -si quiere- de que si
algo le interesa lo intente aprender a pesar de los obstáculos que
le puedan surgir en el camino. La historia esta llena de ejemplos
positivos y también de grandes fracasos.
El
problema surge, cuando lo que se pretende es que el tema a estudiar
se vuelva por si mismo aburrido, espeso e inaguantable. Esto se
debe a que el peligro
principal que tiene la historia para nuestras futuras generaciones,
es que todo lo que esta ocurriendo en el presente, ya ocurrió en el
pasado. Lean ustedes si no, el pasado de Grecia y Roma en la
antigüedad y comprenderan de lo que hablo. No
sera exacto; pero si parecido, por lo que el poder político
teme -y con razón- que la población no solamente se lo acabe
reprochando sino que exija responsabilidades por ello.
La
crisis económica mundial del año 2007, es un buen ejemplo de ello.
Vean si no el documental de: Inside Job, y enumeren a los
responsables que han tenido que dar cuenta de sus actos ante la
justicia. ¿Cuantos de esos responsables han recibido
indemnizaciones millonarias por dejar sus cargos después de que
tuviera que intervenir el gobierno con dinero público?. Y por
último; ¿cuantos de sus dirigentes políticos están ahora en esas
mismas sucursales bancarias o empresas de la industria de altos ejecutivos cobrando mes a mes suculentos honorarios?.
Esto
no solamente ha pasado en EE.UU, sino que también por todo el mundo,
y naturalmente, España es un ejemplo claro de ello. Además, si
sumamos a esto que desde la caída del Muro de Berlín en 1989, la
socialdemocracia se ha “vendido”
al lobby capitalista, no es de extrañar que lo que realmente impulsa
el bienestar de los Estados sean los mercados internacionales.
Y
ya que de ejemplos históricos hablamos, permitanme decirles otro: En
tiempos de la Edad Moderna en España: Los metales preciosos de La
Carrera de las Indias que
llegaban a nuestro país provenientes de las Américas, a partir de
la segunda mitad del siglo XVI el 26% de esos metales que eran del
Estado, ya estaban comprometidos para pagar las deudas de la banca
internacional -alemanes y genoveses- en las diversas empresas bélicas
que la Corona Española mantenía en el Continente Europeo. Por lo
que debido a ello, esos metales nada más llegar a España eran
distribuidos por todo Europa. ¿A que la historia, como he dicho,
tiende a repetirse?
Por
tanto, cuanto mayor sea la ignorancia de la población con temas
relacionados con la historia de nuestro país o de la de otros, más
impunidad tendrá el poder político para llevar sus fechorías;
porque una población que
no conoce su pasado, esta siempre abocada a que ésta se repita. Si
no, ¿porque creen que el PP, recientemente haya eliminado de la ESO
o el Bachillerato las asignaturas de Historia Clásica de Grecia y
Roma? Muy fácilmente, porque precisamente hay, esta nuestro pasado
histórico, social y cultural. Si no nos permiten comprender como
eran nuestros antepasados tanto en lo bueno como en lo malo,
difícilmente nos podremos comprender a nosotros mismos en la
actualidad.
“Nadie
lo dice porque suena retrógrado; pero cualquier educador serio lo
reconoce por lo bajini: ¿cómo es posible que la ley de Educación
de 1957, pese a su paternidad franquista, siga siendo -en el país de
los ciegos, el tuerto es rey- la más seria y eficaz? ¿La que mejor
preparaba a los niños en materias generales como lengua, historia,
lectura, redacción, literatura, ciencias naturales?... ¿Cómo es
posible que en todos estos años de democracia, con dos partidos
alternándose en el poder, no se haya llegado a un pacto de Estado en
materia de Educación? ¿Que cada intento de consenso nacional se
haya abortado por la vileza política, la cobardía moral, la foto en
prensa y el telediario? ¿Que todavía, en este país desmemoriado,
absurdo y ruin, haya tontos que sostengan, sin despeinarse, que la
actual generación es la más culta y mejor formada de nuestra
historia?”.
En
mi opinión, esta claro, que el Sr. Reverte, bajo ningún concepto
defiende el Régimen franquista, a pesar de que muchos de sus
detractores aprovechen para atacarle por ese punto con el propósito
de menoscabar su reputación. Reverte lleva décadas escribiendo
libros de éxito y también ha llevado toda una larga y fructífera
vida en el periodismo. En la que ademas, en más de una ocasión ha
arriesgado su propia vida para dar una noticia. Por mucho que algunos
les pese, nunca ha sido un cobarde, siempre ha sido un hombre
integro; cosa que algunos de los que le critican no pueden decir lo
mismo ni por asomo.
Lo
que esta claro que la España de antes, no es como la de ahora. No
solamente hemos pasado de una dictadura a un Régimen Democrático,
sino que ademas, antes, la bonanza económica de España no era tan
solvente. Podríamos decir, que eramos parte del segundo mundo, es
decir, mucha industria y servicio terciario en desarrollo gracias
sobre todo al auge del turismo y a los precios irrisorios de nuestro
país, es decir, una moneda débil frente a otras y un coste de vida
barato.
Por
tanto, en esa época, estudiar u obtener una carrera superior, solo
se lo podía permitir las familias acomodadas. Bien es cierto que a
partir de los años 60 con el “baby
boom” y
el desarrollo económico tras dejar la autarquía de las décadas de
los cuarenta y cincuenta, la situación en el país se estabilizo.
Aun así, muy pocas familias obreras mandaban a sus hijos a la
universidad. Estudiar en esa época era muy difícil en la escuela
pública, cosa que en la privada era mucho más fácil. Cosa que hoy en día los paramentos anteriormente citados se están invirtiendo.
Curiosamente, a día de hoy, si bien es
cierto que cada vez mayor población de distintos extractos sociales
acceden a estudios universitarios, también no es menos cierto, que
deberiamos preguntarnos si se debe a que se sabe más bien a que la
exigencia en muchas universidades españolas se ha mantenido como
antaño o el nivel a bajado de tal manera, que sacar una licenciatura
resulta tan fácil como aprobar el bachillerato. ¿Por que sera que
nuestras universidades, nunca están entre las cien mejores del
mundo?. Nuestras nuevas juventudes -a pesar de tener el doble de fracaso escolar en
Europa- si bien es cierto que obtienen cada vez
más títulos académicos los que supuestamente realizan dichos estudios; ¿verdaderamente están facultados para
obtenerlos o les estamos dando más facilidades para conseguirlos?.
Al
fin y al cabo, ¿como es posible que un universitario que obtiene una
licenciatura tenga problemas de expresión oral y escrita, y del uso de la oratoria en cuanto a expresarse para desenvolverse en el trabajo, o que las tareas que desempeña sean a veces tan nuevas
para el que necesite asesoramiento para realizarlas? ¿Realmente ha
sido formado correctamente, o simplemente se ha estudiado como un
papagayo la lección sin entender su contenido? ¿Es realmente esta
la universidad que queremos para nuestros hijos?
Seguramente,
la conclusión que llega el Sr. Reverte haga pensar a más de uno, ya
que bajo mi modesto punto de vista es completamente cierto lo que
dice.
“¿Quieren
saber mi conclusión, con esos libros en la mano?”
“Pues
que a ciertos editores y a quienes eligen esos libros para sus
alumnos les importa un carajo la calidad. Todo es banalidad y nada es
cultura. Para beneficio, naturalmente, de oportunistas y de golfos.
De la educación se ha hecho ideología; y de la ideología, negocio.
Vivimos un presente absurdo, sin pasado ni futuro: hemos rebajado la
calidad de la enseñanza, y cada comunidad, cada colegio, cada taifa,
hace lo que quiere”.
“Nadie
combate las faltas de ortografía, la incapacidad expresiva. No se
trabaja la lengua, la expresión, la sintaxis, la gramática. Los
padres son los primeros en protestar si se aprieta a los chicos en
eso. Nadie quiere enfrentarse, comprometerse. En la universidad
aprueban exámenes que hace veinte años habrían suspendido en
bachillerato. Y así, los chicos llegan a los quince años sin saber
nada. Y sin querer saber. Lo que lleva a una última pregunta: los
consejeros de Educación, los maestros que eligen esos textos, los
colegios, las asociaciones de padres, madres y perritos que les
ladren, ¿saben lo que hacen?”
La
última pregunta que plantea Reverte, que tengo la impresión que el
mismo sabe la respuesta, solo que prefiere que los lectores
reflexionen sobre el tema, es la siguiente: Naturalmente que saben lo
que hacen. El desarrollo del intelecto esta mal visto, reflexionar se
ha convertido en un tema peligroso aunque en España esto no sea
novedad -Los afrancesados con Fernando VII, son todo un ejemplo-; ya
que quien lo hace, y sobre todo, quien llega a formulas con bases
solidas mediante el uso de la razón mediante la realización de planteamientos filosóficos
propios o citados de diversas fuentes de enseñanza serán los que
pongan en jaque al sistema.
Quien
lo haga de esta forma, estará en posesión de criticar el sistema
-siempre y cuando este sea criticable-. No valdrán dar argumentos
irracionales basados en los sentimientos -en la mayor parte de esos
casos, son las personas totalitarias quienes las llevan a cabo:
fascistas, nazis, comunistas, nacionalistas-, que es lo que esta en
boga últimamente entre la clase política, porque si estos
argumentos primarios o simplistas perdurasen y se convirtiesen en practica
habitual, nos deshumanizaríamos y estaríamos abocados a la
destrucción como país y especie.
Al
fin y al cabo, no es de extrañar que en los países escandinavos,
Canada, Australia, Nueva Zelanda, Islandia y algún que otro más que
ahora no me viene a la cabeza, dispongan de unas buenas estructuras
sociales y de que su clase política desarrolle para sus respectivas
sociedades todo un sistema para mejorar el desarrollo estudiantil con
objeto de conseguir entre sus conciudadanos la excelencia,
indiferentemente de la clase social a la que pertenezcan.
No deja de ser curioso, que este tipo de países tenga como denominador común los
siguientes aspectos:
- Territorio nacional extenso, pero poco poblado.
- Concentraciones de población frente a grandes áreas despobladas.
- Recursos naturales suficientes para el propio auto abastecimiento. Sobre todo en energías renovables y no contaminables.
- Rígida legislación penal.
- Prestaciones sociales amplias que abarcan a buena parte de su población.
- Ciudadanos respetuosos con sus Instituciones y un carácter unitario en el cumplimiento de la ley.
- Poco peso internacional.
- Políticos que ven en los ciudadanos una apuesta segura para el progreso y bienestar de su país, es decir, políticas activas en Investigación y Desarrollo.
- Baja intensidad política en la sociedad: Prácticamente innecesidad de escoltas de sus dirigentes en el poder ejecutivo u oposición.
- Escasa corrupción política debida principalmente a una mentalidad del bien común como ciudadanos de un país responsable y una dura legislación con penas de cárcel e indemnizaciónes correspondientes de lo que se ha sustraído del erario público.